07 junio 2014

400.000 millones...para esto

La noticia económica de la semana ha sido la decisión  del Banco Central Europeo de inyectar 400.000 millones de euros. La cifra astronómica se escapa a la comprensión de la mayoría de los mortales. Pero también su significado real y el mecanismo mediante el cual se lleva a cabo.
Aún a riesgo de incurrir en alguna inexactitud, vale la pena intentar un explicación sencilla de ambos.
Empecemos por el final ¿Quién toma la decisión? El Comité Ejecutivo del BCE. Este comité presidido por Mario Draghi esta formado por un portugués, un francés, dos alemanes, un luxemburgués y un italiano. Todos ellos altos funcionarios en sus países de origen y designados a dedo por los bancos nacionales-poderes económicos del área Euro.  No tienen que dar cuenta a nadie, excepto a los que los han designado, de sus decisiones.
¿De dónde sale el dinero?  De ningún sitio. El dinero es simplemente creado por el BCE.  Para ello anota en su pasivo 400.000 millones y en su activo va anotando los prestamos  que entrega a los bancos hasta llegar a 400.000 millones. ¡Esto es poder de verdad!
Como garantía de estos prestamos los bancos ponen títulos de deudas contraídas con ellos de todo tipo.
Es decir las deudas no desaparecen solo que ahora los títulos los tiene el BCE.
¿Qué hacen los bancos con ese dinero? En primer lugar devolver a los inversores  (que se van de rositas)  el dinero que habían depositado y con el que han financiado el boom de la construcción, autopistas, aeropuertos y otros desmanes y después, eso espera el BCE, prestarlo a las empresas para que creen riqueza, den beneficios, y sea posible devolver las deudas.
Varios problemas: El primero y más importante es que los clientes, es decir las empresas de un país, deben tener capacidad de producir riqueza y está por ver si es posible en un país desindustrializado como el nuestro.  El segundo es  el tamaño de la deuda, que es enorme, y que condena a los países por generaciones a trabajar para pagarla. Por último, el agujero de los bancos es desconocido, y por lo tanto está por ver cuanto dinero se presta finalmente.
A esto hay que añadir que si la inyección de dinero no va acompañada de una creación de riqueza, el Euro se depreciará hasta un punto que sea inaceptable para Alemania y volveremos al punto de partida.
¿Por qué hace entonces esto el BCE ? La palabra es deflación. Una bajada continuada de precios sin que aumente la productividad. Esto, que podría parecer bueno, es la bicha del Capitalismo. ¿Por qué? Por una parte, una caída de los precios de las cosas hace que nuestro dinero valga más, pero también, que esperemos a mañana para comprar por si bajan los precios y se revaloriza más, lo que a su vez origina otra caída de los precios, que solo se puede obtener reduciendo empleados o sus sueldos, con lo cual cada vez habrá menos compradores y habrá que bajar los precios, y reducir empleados y así… Esta situación se está empezando a producir en España. Pero también, y esto es lo que realmente les preocupa, significa que todas las cosas: el capital, valen menos y así sus fortunas menguan al ritmo de la deflación.  El asunto para los capitalistas no es menor, si tenemos en cuenta que hoy solo Apple vale en bolsa tanto como todas las empresas del IBEX 35 juntas.
El BCE espera que con una cantidad de dinero monstruosa en circulación se evite la reducción de los precios y con ello la deflación.  El problema de esta receta es, de nuevo, que para que funcione requiere que se destine el dinero a crear riqueza y no a pagar deudas. 

Sin una quita de la deuda, no parece que haya solución estable. El problema es que  , en gran medida,  nos debemos a nosotros mismos…..

03 junio 2014

Soñando con la Tercera República


El gran fontanero de las cloacas ya había avisado que lo de la Gran Coalición no era ninguna tontería. ¿Una boutade? Algunos lo tomamos en serio. Una vida entera navegando en la bazofia le da todas las credenciales.
Hay un proceso Constituyente en marcha, para eliminar los artículos molestos de la Constitución: dicen que son decimonónicos, y facilitar nuestra conversión en  colonia de Alemania y burdel de Europa. El resultado de las elecciones no ha hecho más que acelerar el proceso, y a falta de un Obama, aquí se han tenido que sacar de la manga al Príncipe. Guapo, casado con plebeya e hijas de Burda. La solución para declarar un nuevo tiempo y pelillos a la mar. Lo cantan a una los lacayos de la Corte. La Gran Coalición pedirá Felipe VI para salvar a la Patria, y ¡faltaría más! allí estará firmando PPSOE.
Hoy, si nada lo remedia, se inicia otra Restauración Borbónica. La tercera. No hay manera de librarnos de esta peste.
Todo calculado.El tempo perfecto. Lunes, con el Campeonato del Mundo en dos semanas.
El proceso de entronización, tan rápido como se pueda y sin complejos. Es una vergüenza que dos partidos que no representan ni a la mitad de los españoles, se arroguen el derecho de decidir la forma de Estado. Con nocturnidad y alevosía.  No van a aceptar enmiendas a la ley de sucesión ad-hoc . ¡Y estos se atreven a despreciar a Chaves y a dar lecciones de democracia!
Es curioso como los tres dirigentes del PSOE del Régimen del 78, han acabado en la ignominia: Crimen de Estado y corrupción organizada el primero, ruina y esclavitud económica grabada en la Constitución el segundo y Restauración Borbónica el tercero. Así quedará en la historia. El consuelo es que hoy desaparece el PSOE. Ellos no lo saben, o quizás sí, da igual, pero así es.
Hoy he estado en Sol. No era el 15M pero quise estar allí para recordarlo y recordar al abuelo Pepe verdadero, con el que escuchaba en la radio el himno de Riego debajo de una manta.  Entonces soñaba leyendo nombres exóticos en el dial iluminado de una radio, hoy cerré los ojos en Sol y también soñé.

Después de todo, la vida es un sueño y los sueños, sueños son.