02 abril 2007

Energía II

Hace un año había una compañía española, creada con los impuestos de los españoles para atender las prioridades de España en un momento dado: La minería del carbón.

Después la quisieron comprar unos extranjeros de Cataluña, por lo que parece a bajo precio, o vaya Vd. a saber, ya que lo que se vende en bolsa es la expectativa de valor y no el valor mismo. En cualquier caso eran extranjeros, y pagaban en papelillos.

En la más pura tradición hispana, nos liamos a garrotazos, amarrados a la tierra, como los gañanes de Goya. Sin cuartel, a muerte. Y así hemos llegado a lo de hoy. Unos pocos, muy pocos, se reparten el botín. Lo que habíamos acumulado a golpe de impuestos y sufriendo contaminación: Recordemos As Pontes.

El resultado final: ENDESA queda en manos italianas, no catalanas. ¡Que alivio! En poco tiempo ACCIONA, se quedará con la parte de ENDESA que le parezca rentable, y venderá el resto para hacer caja. ENEL, a la que se deben ciertos favores, venderá lo que necesite, por ejemplo las empresas de Sudamérica, y activos en España para enjugar sus necesidades en Italia, que son muchas. EON deja la patita y coloca su marca en España, quedándose con una parte muy importante del negocio en Europa, centrales en España, incluida parte de una nuclear, y sobre todo con los emplazamientos de viejas centrales que podrá renovar, no le falta dinero, y pronto será un actor importante en España y a medio plazo, no creo que pasen ni cuatro años, estoy seguro, recogerá a buen precio los trozos de ENDESA que queden.

Esto no es el final, es solo es para tomarse un respiro y hacerse una rica merienda de plusvalías. La foto final no cambiará. Estoy seguro. En el camino pagaremos la factura en el recibo de la luz. La revisión de la tarifa eléctrica en junio nos dará las pistas y la traca final el año próximo.

En cualquier caso a Zapatero le colocarán con toda seguridad el sambenito de ser culpable del desmantelamiento de la empresa más importante de España. No se si culpable, pero torpe mucho. Debería conocer el enraizado patriotismo de nuestros empresarios, por llamarles algo. En acusar a Zapatero, se unirán en coro, la ultraderecha: enlazando en un popurrí patriótico ENDESA con la claudicación ante los etarras, y también los sindicatos. Los mismos, como CC.OO., que apoltronados en el consejo de Caja Madrid, hablan y actúan como consumados capitalistas.