El golpe de Suresnes, su financiación por la Fundación Friedrich Ebert, brazo del SPD alemán, y hay quien sostiene de la CIA, las oscuras maniobras de la Transición, para deshacerse del PCE y también de todos los partidos socialistas que reclamaban el Marxismo como fundamento ideológico, a través de la trampa de la Federación de Partidos Socialistas montada por Enrique Barón, Carlos Zayas (un informador de la CIA) y Joaquín Leguina. Abandonar el Marxismo, la incorporación de personajes de la derecha de siempre como Jose Bono, Francisco Vazquez y José Federico de Carvajal, el apoyo a Reagan en el despliegue de misiles nucleares en Europa, la entrada en la OTAN, abortar la consolidación de un tejido industrial en España, entrando en Europa como un país de servicios y tomates (los favores se pagan), después, el GAL, Filesa, incontables episodios de pequeña y gran corrupción, las amistades de Gonzalez con cleptócratas como Benito Craxi y Carlos Andrés Perez, y empresarios mejicanos de dudosa reputación -no importa que el gato sea blanco o negro si caza ratones- y después de todo esto......después la nada, es decir Zapatero, mediocre, embaucador y cobarde, como todos los personajes que cierran capítulos de la Historia, y más corrupción, ineptitud y nepotismo que desintegra el sector energético español, borra la Socialdemocracia de la Constitución, nos une al Escudo Antimisiles de USA y en la coda final indulta a un banquero, culpable, según el Supremo, de practicas mafiosas con la ayuda de un juez condenado por corrupción, para irse después, en plena crisis económica, a vivir a un chalet de Somosaguas, en compañía de empresarios y banqueros. Esto, aunque sea una caricatura, no está lejos de describir el ciclo vital del PSOE
En el panteón de hombres ilustres de la "izquierda" están: Gonzalez, consejero de Gas Natural; Solchaga, miembro del FMI; Javier Solana, secretario general de la OTAN de los bombardeos y Almunia, comisario de la UE,...
No solo es que se haya acabado la razón de ser de la socialdemocracia, este sería un final digno del PSOE, es que los poderosos ya no necesitan la charada que montaron en España en 1974, para que pareciera que llegaba el cambio, sin cambiar nada.
Lo que queda hoy es la inercia y personajillos pintorescos saltando por el escenario. Así son siempre los “finale” mezcla de drama y bufonada. El PSOE se acabó.
La próxima brisa o vendaval se llevará también el nombre, no sin que antes todos los arribistas hayan buscado abrigo.
Algunos, no les creímos nunca, pero todavía hay 7 millones que huérfanos que creen que son la solución. Cuanto antes descubran que son realmente el problema, la barrera de contención que ha impedido la existencia de un partido de izquierda en España, mejor. En palabras de un dirigente del PP en la noche electoral "Es mejor tener a un PSOE fuerte en el Parlamento. Si no, la oposición se va a la calle, y ahí no tienes a nadie con quién negociar un alto el fuego”.
Todo apunta que en términos de riqueza y bienestar vamos a dar un salto hacia atrás de varios lustros. Aprovechemos para elegir, esta vez de verdad, los que nos sacan adelante. En la calle.
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